Las clases de Sol son dinámicas y accesibles, nos conectan con nuestro cuerpo, con la alegría, con el juego, con la tierra, y con lo que no nos creemos capaces de lograr: superar nuestras limitaciones y sentir la música brotándonos. Muy bien acompañadxs en un contexto de creatividad, amor y generosidad. Puro disfrute!